HIJOS DE DIOS

                        Los creyentes pasan a tener la distinción de hijos de Dios, como parte de los fundamentos de la fe, en vista a la obra de Cristo en todo aquel que le recibe. Una nueva vida en Cristo, la cual consiste en volverse a Dios como un Padre, viviendo bajo los principios de su Palabra y disfrutando esta condición.

La categoría de hijo en el contexto universal y social implica una forma de sujeción, pero también de tutela; contar con derechos, pero también socialmente con deberes es de hecho la regla general. Los padres tienen deberes para con los hijos según los acuerdos y leyes de cada país. Los hijos cuentan con derechos de cuidado, como también de herencia una vez que los padres fallecen.

Las escrituras mencionan a los hijos de Dios bajo una relación de derechos de amor y cuidado por parte Dios, como un Padre bueno y justo que tiene cuidado de sus hijos.

¿Cómo se adquiere esta categoría de “hijo de Dios”? ¿qué implica esto? Veremos a continuación cómo las escrituras nos dan pauta sobre esto y en qué consiste la nueva vida de hijo de Dios.

  1. Cómo se recibe esta distinción según las escrituras. En el evangelio según San Juan en el Capítulo 1:11-12: Se precisa que el hecho creer en la obra de Cristo le concede a la persona la potestad de ser hechos “hijos de Dios”
  2. Qué característica distingue a los hijos de Dios. Romanos 8: 14 al 16, señala que:
    • Quienes son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios (Versículo 14)
    • Como hijos, hemos recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos “ABBA Padre” (Versículo 15). Esta expresión en arameo, alude a los términos: “padre, papá, papito”; implica cariño, respeto y amor cercano.
    • “ABBA Padre” aparece en las escrituras 3 veces mencionado: Marcos 14:36, Jesús orando al Padre en Getsemaní; Gálatas 4:6, Dios envía el Espíritu de su Hijo, el cual clama ¡“ABBA Padre”!  La pauta de esta expresión la marca Jesús en un momento de suma aflicción, donde esta palabra expresa la cercanía con su Padre y la posibilidad de socorro.
    • Se distingue entonces una relación de Padre a Hijo; habla de una relación cercana, ésta es la que podemos tener nosotros con Dios nuestro Padre celestial. Dirigirnos a él con toda confianza y esperanza que nos responderá, porque él es nuestro Papá.
  3. El amor de Dios en favor de la humanidad. Por su amor nos hace hijos de Dios, 1ra de Juan capítulo 3: 1-2 “Mirad cuan amor nos ha dado el Padre, para ser llamados hijos de Dios”
  1. Deberes y derechos como hijos:

RESUMEN:

  • Deberes como hijos. Ser obedientes a nuestro Padre Celestial en vivir de acuerdo a sus principios. 1ra de Pedro 1: 14
  • Dios nos ve como hijos y como herederos por medio de Cristo. Gálatas 4:7
  • La relación de Padre a Hijo, Dios la toma en cuenta; vivamos por ella, andemos en ella, pues contamos con un Padre bueno que está en los cielos atento a nuestras oraciones. (Mateo 23:9)

Pr. Gabriel Acosta G.