TEMA: “Cuando Dios alimenta”  San Mateo 15:32, 34 – 37

              La necesidad de alimento y la compasión de Jesús

  1. Cuando se habla de pan en general, estamos hablando de un alimento muy común y que todos consumen, en todo lugar. Para muchos pueblos es el alimento básico, debido a la escasez y la pobreza.
  2. Precisamente hoy el mundo está viviendo una crisis de abastecimiento de alimento bastante grande; y los expertos señalan que éstos escasearán de manera significativa en los próximos años, debido al cambio climático que afecta a los cultivos.
  3. A pesar de la responsabilidad que tiene en esto el propio ser humano con la industrialización, la misericordia de Dios aún está presente con los necesitados. Y es precisamente de lo que hablaremos en esta ocasión.
  4. Dios está consciente de nuestra necesidad y de la de todos. El relato bíblico dice que la multitud seguía a Jesús hace ya tres días; por esta razón el Señor se preocupa de la necesidad de darles alimento físico para que regresaran a sus poblados. Esto representa precisamente que nuestras necesidades y motivos de oración que están allí evidenciados, el Señor no los pasa por alto; están en su registro de amor y en su corazón para otorgar, proveer respuesta y esperanza a nuestras vidas.
  5. En la realidad y en la evaluación, tal vez el escenario es escaso para nosotros; sin embargo, los cálculos nuestros, tal como le ocurrió a los discípulos que tenían sólo siete panes y unos cuantos peces, no guardan relación con la provisión poderosa de Dios que es mucho más abundante, la cual puede ser multiplicada aunque la reserva sea muy pequeña. Dios tiene el control.

                          El milagro de la provisión y la abundancia

  1. La pregunta de Jesús para el recuento, a Él no le preocupa. A sus discípulos, en el pasaje bíblico, les preocupó la pregunta: ¿cuánto había disponible para alimentar a cuatro mil personas? Este asunto a Jesús no le preocupó, puesto que Él tenía ya en sus manos la solución.
  2. ¿Cuál es la evaluación que podemos hacer de nuestra necesidad? Tal vez sea mayormente pesimista; sin embargo, Dios ya tiene la provisión y la respuesta para nosotros. Los discípulos dijeron: “¿de dónde sacaremos tantos panes aquí en el desierto para darle a la multitud?”, como si la pregunta de Jesús no hubiese dimensionado la real necesidad para la multitud.
  3. Queridos amigos, amigas, hermanas, hermanos; ¿acaso crees que Dios no conoce tu necesidad? ¿la dimensión de tu real problema?
  4. Dice la palabra del Señor en Hebreos 10:39: “Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición; sino de los que tienen fe para preservación del alma”. Es por ello que en esta noche, el Señor nos invita a pararnos en la plataforma de la fe y de la esperanza, pues claro está, que la necesidad es grande pero el poder de Dios, su misericordia y su compasión es mayor.
  5. La invitación en esta noche, es a confiar en las palabras del Señor. Jesús instruyó a sus discípulos que las personas se recostasen en la tierra, para que luego Jesús bendijera estos alimentos y los multiplicara.
  6. El Señor quiere saciar nuestra necesidad, hacernos descansar de nuestro agobio; pues en Dios hay abundancia y hay descanso. En el milagro de la multiplicación de los alimentos, se dice que sobraron siete canastas llenas, dando a entender que Dios es abundante, generoso; mucho más allá que nuestras posibilidades.

Radio La Noticia Buena – Programa “Oremos”